Solo ficción

Me despierto, miro a mi alrededor y comienzo a recordar qué es lo que debo hacer hoy…estoy algo confundida, algo dormida quizás…miro la ventana y no sé muy bien porqué esta abierta, afuera llueve y dentro de mi habitación hace mucho frío, me levanto tomo un chaleco que hay en la silla junto a mi cama, me dirijo a cerrar la ventana, sin embargo me detengo a mirar que a llovido bastante, y un olor a tierra mojada se impregna y se me es imposible no recordar esos días de invierno en que estaba a tu lado…y creo que no conocia este frío que hoy cala en lo profundo de mi, porque a tu lado siempre sentía esa calidez única…me detengo frente a la ventana abierta y miro fijamente, con mi mente en otro tiempo y lugar, recordando esos tantos días en que pareciamos ser uno solo…y es inevitable también que una lágrima caiga tímida por mi mejilla. Y como todos los días me pregunto que será de ti, si estarás bien o si alguna vez algo te lleve a recordarme, como me ocurre a menudo... nunca lo sabré. Estoy en medio de aquellos pensamientos y me interrumpe el sonido del teléfono, es Andrés, quiere saber a que hora debe pasar por mi…un poco confundida aun, no se muy bien que decirle, opto por fingir que no me siento muy bien, lo cual tiene mucho de cierto, pero creo que es peor, pues despierta ese lado de novio protector, y sin preguntar, dice que vendrá a “cuidarme”…me hago la idea y lo espero.

Voy a la cocina, no tengo ganas de comer, sin embargo un café me haría bien, tomo un cigarrillo y me siento en mi cama, y miro nuevamente por la ventana que aún permanece abierta y cada vez es mayor ese olor a tierra mojada. Ahora me dedico a escuchar la lluvia caer, y vuelvo a recordar todas esas veces que soñamos mientras afuera llovía, noches que dormiamos abrazados y despertabamos pensando en todo ese futuro que según nosotros nos esperaba…recordé que pase mucho tiempo creyendo que aún habia tiempo, y que quizás la vida volveria a juntarnos…el cigarro se va consumiendo un poco por mis labios y otro por el viento que entra fuerte por aquella ventana que me ha llevado nuevamente hacia ti…a pesar de estas lagrimas que caen sin casi notarlo, una leve sonrisa aparece, y es que el recordarte me hace entender porque quería que fueras tu quien me acompañara toda la vida…me interrumpe esta vez el timbre, seguro es Andrés…me refugiaré en sus brazos y lloraré, quizás cierre mis ojos e imagine por segundos que eres tu quien seca mis lágrimas…como antes...

...creo que no dejaré nunca más, que alguien me prometa algo que no sabe si cumplirá...

Es sólo ficción...sólo eso.